Hay estudios en los que parece que el SARS-COV-2 no afecta directamente a la fertilidad masculina, a diferencia de otros virus recientes, como el Zika. Tampoco, aunque los estudios son más limitados, a la reserva ovárica de la mujer. Sin embargo, la puerta de entrada del virus a las células, el receptor ACE2, se expresa ampliamente en ovarios, útero y vagina. En el endometrio, por ejemplo, la expresión de proteínas involucradas en la infección por SARS-CoV-2 –como el receptor TMPRSS4, la proteína furina, el receptor Basigina (BSG)– es muy alta, mientras que la expresión del receptor clave TMPRSS2 es moderada y la de ACE2 es baja. Pero aún no está claro si hay un efecto directo del virus en la implantación del embrión.Con respecto al ciclo menstrual, se sabe que los virus de la hepatitis B y C o el del HIV afectan al sistema reproductor femenino y causan trastornos en el ciclo menstrual. En un estudio con mujeres ingresadas por covid cerca del 30 % (de 177 mujeres) presentaron cambios en el ciclo menstrual y variación del volumen del mismo. Las concentraciones medias de hormonas sexuales y de la hormona antimulleriana (AMH, hormona que permite conocer el índice de fertilidad en la mujer y la capacidad fértil de los hombres) no fueron diferentes de las de los controles de la misma edad. Sin embargo, otra investigación reciente cuestiona los resultados en mujeres ingresadas. El estudio contiene un sesgo importante, ya que solo un 5.8 % de las mujeres con covid-19 necesitan ingresar.Es necesario, pues, estudiar el impacto de covid-19 sobre la fertilidad femenina mediante protocolos específicos para obtener evidencias científicas sólidas.